martes, 7 de marzo de 2017

"La Barraca" de Blasco Ibàñez i Benimaclet

“LA BARRACA” DE BLASCO IBÁÑEZ I BENIMACLET


“La Barraca” és una de les obres en més repercussió del nostre lliterat Vicent Blasco Ibáñez. La novela va ser publicada en un principi en el diari “El Pueblo”, més tart en format llibre i va ser duta al cine i a la televisió.

El llibre es desenrolla en la Valéncia rural de finals del sigle XIX. Descriu en precisió les dures condicions de vida de la població llauradora i agrícola. El tio Barret es veu impossibilitat de seguir treballant l'horta que havien cultivat els seus antepassats durant generacions al no poder pagar l'arrendament al propietari de la terra, D. Salvador. Com a conseqüència, tots els veïns del llogaret, en Pepeta i Pimentó al cap es conjuren per a impedir que ningú torne a treballar en eixa parcela.

Fins que aplega Batiste i la seua família (la seua dòna Teresa i els seus fills Roseta, Batistet i Pasqualet) que, per la necessitat, s'instalen en la finca i accedixen a cultivar la finca abandonada a canvi de dos anys de carència en el pago de l'arrendament corresponent. A partir d'eixe moment es voran infatigablement acossats pel restant de la comunitat, que els acusava de plegar-se a les exigències del terratinent perjudicant en això els interessos del colectiu.

Sobre el lloc a on se situa l'acció de la novela s'ha escrit molt. Alguns estudiosos la situen en Russafa. Pero en 1922, el 29 de giner, se publicava en el diari “El Pueblo”, fundat per Blasco Ibàñez, un artícul signat per “V.L.” que situa “La Barraca” en l'Horta de Benimaclet. Certàment sabem que Blasco Ibàñez va recorrer a sovint l'Horta de Benimaclet al començament de la seua activitat política i és possible que estes visites li serviren d'inspiració. 

Repreduïm l'artícul...

En marcha hacia el Progreso

No podemos pasar por alto en estos momentos de lucha política lo que para nosotros es y representa nuestra bella vega valenciana, de donde supo sacar con mano maestra toda la expresión característica de su espíritu, todo el tesoro de su rica vegetación la pluma incomparable de nuestro gran novelista, gloria de Valencia, artista de fama mundial, don Vicente Blasco Ibáñez.

Los habitantes de nuestra vega recorren el mundo encarnados en los personajes creados por el insigne escritor en sus novelas, y así estos personajes son admirados y estudiadas sus costumbres, para después entresacarlos y darles vida artificial en la escena, levantando cada uno de ellos un monumento de gloria para nuestra Valencia.

Así nos encontrarnos leyendo "La barraca", toda la huerta que circunda a Benimaclet cuyos vecinos deben recordar aquella barraca situada en el camino de Farinós al lado del "Hórt de Mistéris", frente al  "Clót de Vera", en cuyo interior existía una escuela dirigida por aquel tipo de cesante que para ganarse el sustento no encontró otro medio que erigirse en apóstol y enseñar a unos cuantos chiquillos, entre los cuales se encontraba "Morros d'aca", tipo original, las primeras letras del "Cató", y que sus discípulos aprendían como si para ellos hubiera llegado la Aurora del Progreso, llevando a sus casas llenos de alegría y satisfacción las notas sobresalientes que les concedía el maestro a su buena aplicación.

Bien hizo Blasco en dirigirse a Benimaclet para buscar motivos y tipos con que poder desarrollar su novela "La Barraca", donde también supo encontrarlos para tejer la trama magistral de su obra; pues si en ella encontramos escenas trágicas que demuestran la incivilización de aquellos tiempos, cuyas causas nacían del disimulado feudalismo que entonces existía y que por desgracia continúa pesando aún sobre los labradores, cuyas cadenas no han sabido romper, también nos muestra aquel primer paso; hacia el Progreso, ya que en medio de la huerta, oculta entre árboles y bajo un techo de paja, existía una escuela donde "podían ilustrarse" los hijos de los campesinos.

Encanto de los extranjeros que visitan Valencia y que allá en su país leyeron las obras  de Blasco, es nuestra vega, y hacia ella dirigen sus pasos ansiosos de encontrar al "tio Barret», a "Pimentó", al "Tio Copa" y a tantos otros tipos originales que vieron en la obra leída; pero sólo quedan reminiscencias de aquellos, pues poco a poco los avances de la vida moderna va haciéndoles desaparecer y el desencanto de nuestros visitantes es tan grande como grande es el interés que despertó en su espíritu inquieto las descripciones maravillosas que Blasco Ibáñez hizo de nuestra rica vega valenciana.

En la novela del gran escritor vive nuestra huerta unos momentos ya pasados, que el  Progreso adorna con nuevos encantos...

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Poble de Benimaclet